12/11/11 – Propuesta para el mundo. Unos 30 ciudadanos marcharon anoche por las calles de Lima para sumarse a la primera jornada mundial de protesta por las cuatro horas de trabajo como solución a la crisis económica. “No más desempleo, no más explotación, jornada de 4horas es la solución”, coreaban.

"Que haya chamba para todos, 4 horas de trabajo", "Por más tiempo para tus hijos, 4 horas de trabajo" y "Por un buen vivir, la jornada reducir" fueron otras de las consignas.

“Esto ha sido parte de una jornada mundial de movilización y protesta convocada para hoy”, explicó Carlos Tovar “Carlín”, autor del Manifiesto del Siglo XXI y promotor de la audaz propuesta. “Estamos tratando de impulsar un movimiento mundial, esto es una cosa de largo aliento”, señaló. “Es histórico que hoy se haya producido en el Perú la primera manifestación por la jornada de cuatro horas, que viene a ser el equivalente de hace 90 años la jornada de ocho horas”, indicó.

Cabe indicar que los manifestantes, al finalizar el recorrido por la céntrica avenida Arequipa, firmaron una carta dirigida al próximo XIII Congreso Nacional de la Central Nacional de Trabajadores del Perú (CGTP), pidiendo a la importante central sindical que discuta esta propuesta y la lleve a foros internacionales.

Entre los manifestantes también se encontraba Victoria de Sotomayor, regidora de la Municipalidad de Lima. “Ha sido una iniciativa muy interesante”, señaló en declaraciones para Yunza TV. “A muchas personas que hemos visto en la avenida les ha generado dudas y les ha llevado a reflexionar”, relató. “Mi mensaje es para aquellos que han terminado de estudiar y ahora trabajan, y para aquellos que no pudieron estudiar y sólo trabajan: en estos momentos estamos para reflexionar y decir queremos vivir, no es sólo trabajar y olvidarnos de nuestra vida y de nuestras familias”, señaló. “Tenemos derecho a gritar y a decir: queremos otra cosa, queremos disfrutar de la vida y queremos desarrollarnos como personas”, explicó la joven regidora.

La actividad fue convocada vía Facebook por un grupo de jóvenes trabajadores, sindicalizados y no sindicalizados, así como por miembros de espacios políticos como la Juventud Comunista, el colectivo Acción Crítica, entre otros, quienes respondieron al llamado internacional lanzado por la Alianza Global por una Alteración Inmediata (GAIA, por sus siglas en inglés).

Cabe destacar que GAIA y diversas redes globales asumieron, de esta manera, la propuesta lanzada por el peruano Carlos Tovar hace algunos años. La organización internacional considera que esta es una propuesta capaz de articular las diversas demandas dispersas de los movimientos de indignados a raíz de la crisis económica, pues se dirige a solucionar los problemas globales de desempleo y explotación.

Solución a la crisis

La propuesta de reducción de la jornada laboral tiene que ver con el increíble aumento de la productividad que ha tenido lugar en el mundo en el último siglo y especialmente en las últimas tres décadas gracias a la tecnología. Hoy, un trabajador promedio produce cinco o seis veces más que hace 90 años, cuando se estableció la jornada de ocho horas, pero no ha habido nuevas reducciones del horario laboral.

De acuerdo al análisis de Tovar, así como a otros investigadores, esto ha generado por un lado desempleo, pues la tecnología desplaza mano de obra humana, y por el otro lado sobreexplotación, pues para no perecer en la competencia las empresas exigen cada vez más a sus trabajadores. Si se reduce la jornada laboral, se “eliminaría el desempleo, porque las empresas se verían obligadas a contratar a más trabajadores para cubrir sus necesidades”, y se “eliminaría la sobre-explotación, porque el tiempo de trabajo se repartiría de manera equitativa y nadie trabajaría 10, 12 o 14 horas”, señalan los organizadores en su página de Facebook.

De esta manera, se podría reactivar la economía mundial, ahora golpeada por la crisis financiera.

Los organizadores enfatizan que esta medida tendría que tomarse a nivel mundial, en un foro como la Organización Internacional del Trabajo (OIT), pues si sólo un país individualmente decide reducir su jornada laboral esto afectaría su competitividad. (PM)